La erótica de la consulta

Hoy sale una noticia en los periódicos. Un médico acusado de abusos se defiende con el argumento: "se crea una gran carga erótica en la consulta".

Es antiguo, pero no por ello menos eficaz el método de no aceptar responsabilidad de lo que se hace convirtiéndose en víctima de las circunstancias. En este caso "la carga erótica" le obligaba a tocar las tetas y meter los dedos en la vagina a las pacientes con dolor de espalda.
Puede sonar inverosímil pero en la vida diaria si prestamos atención podremos encontrar ejemplos igual de absurdos.
Te maltrato porque te amo, te puteo porque te necesito, te incomodo porque te deseo, te engaño porque si descubres la verdad te podría perder, te robo porque me daba miedo pedirte...
Personas que no se responsabilizan de una antipatía: no te llamé porque pensé que no te gustaría asistir.
Personas que no se responsabilizan de quedar mal: no te felicité porque sé que no te gusta.
Los tacaños: no te regalé nada porque sé que es demasiado materialista.
Luego la falta de responsabilidad y de asumir sentimientos y decisiones se prolonga de manera social y política: El IPC no sube, es una regresión del estado de bienestar.
La discriminación positiva no es discriminación, puesto que las mujeres ya lo pasaron suficientemente mal. Instituto de ayuda al mujer (y los hombres tambien lo financian con sus impuestos)
Tu no haces descargas P2P pero pagas un canon "por si acaso".

Y todos calladitos, que quejarse y pensar es muy fascista.
Todos calladitos, contando los días de vacaciones y los plazos de la hipoteca que parece ser que es lo único que importa.
Porque los "malos", en realidad, son los de la publicidad que nos crean necesidades y provocan ansiedad al no tener todo lo que nos proponen..Si, que malos, pensar diferente ya no es cool, menos cuando una productora decide sacar dinero al pensamiento ácido.
Pero tan solo es un reflejo de la falta de responsabilidad de cada uno de nosotros y con la que convivimos hasta cuando vamos al médico.
La carga erótica de los descerebrados.